“El Departamento de Justicia ha detenido a otros dos presuntos líderes del Cártel de Sinaloa, una de las organizaciones de narcotráfico más violentas y poderosas del mundo. Ismael Zambada García, o ‘El Mayo’, cofundador del Cártel, y Joaquín Guzmán López, hijo de su otro cofundador, fueron arrestados hoy en El Paso, Texas», señaló en un comunicado.
La entidad precisó que «ambos hombres enfrentan múltiples cargos en Estados Unidos por liderar las operaciones criminales del Cártel, incluidas sus letales redes de fabricación y tráfico de fentanilo». Medios de México y Estados Unidos aseguraron que ambos se entregaron a la justicia.
“El fentanilo es la amenaza de drogas más letal que nuestro país haya enfrentado jamás, y el Departamento de Justicia no descansará hasta que cada líder, miembro y asociado de los cárteles responsables de envenenar nuestras comunidades rinda cuentas”, acotó el fiscal General, Merrick B. Garland. Alias ‘El Mayo’ era el narco más buscado por Estados Unidos, que ofrecía por su paradero una recompensa de USD 15 millones. El narco, de 66 años de edad, no ha pisado una cárcel en décadas.
Por su parte, Joaquín Guzmán López es uno de los llamados «Chapitos», los hijos del narcotraficante El Chapo Guzmán, quien fuera jefe del cartel de Sinaloa y que cumple cadena perpetua en una cárcel estadounidense. Tras la captura en enero de 2016 de El Chapo y su extradición a Estados Unidos al año siguiente, sus hijos se convirtieron en pieza clave de la organización delicitiva. Uno de ellos, Ovidio Guzmán, fue entregado también a la justicia estadounidense en septiembre pasado.