Las fuerzas del orden en Ecuador han decomisado 450 toneladas de droga y ha destruido 100 de ellas, según reveló este domingo 18 de junio el presidente de la República, Guillermo Lasso, en una cadena de radio y televisión en la que pasó revista a acciones emprendidas contra la inseguridad. Destacó también el tratamiento para destruir la droga incautada, cuyo residuo es convertido en material de construcción, lo que ha sido destacado por varias organismos internacionales.
«La pulverizamos de manera impecable» y «con nuevas técnicas», señaló el mandatario al reiterar que se han incautado 450 toneladas de drogas durante su mandato que inició en mayo de 2021. Otras 16 toneladas de alcaloides incautados se destruirán la próxima semana y dijo calcular que esa cantidad equivale a unos 800 millones de dólares en el mercado ilegal.
Asimismo, Lasso resaltó las acciones que se han emprendido en el marco de la llamada «guerra contra el crimen organizado» emprendida por su administración para intentar frenar el auge de la delincuencia registrado en el país desde hace un par de años. Aseguró que las fuerzas del orden han realizado más de 380.000 operativos y desarticulado 545 organizaciones criminales en todo el país.
Recordó que se han incorporado 8.500 nuevos policías a quienes les reiteró su mensaje de que usen las armas de dotación en caso de que se vean obligados a defender la vida de los ciudadanos o de ellos mismos. «La ley los ampara», aseguró el gobernante en su mensaje a los nuevos agentes y dijo que hasta fines de año se tiene previsto que ingresen a la Policía 16.000 efectivos.
Este es un «crecimiento histórico en la fuerza policial» dijo y recordó que ya han llegado al país 5,5 millones de municiones, de cerca de 24 millones adquiridas para mejorar la dotación a la entidad del orden. Lasso, cuyo mandato se recortará en este año por haber invocado una norma constitucional llamada «muerte cruzada«, ha soportado en su administración una oleada de crímenes y delitos que han generado zozobra entre la población.
El gobernante aplicó la «muerte cruzada» en mayo pasado, mecanismo por el cual disolvió la Asamblea Nacional, recortó su mandato que debía concluir en mayo de 2025, llamó a elecciones presidenciales y legislativas anticipadas (el próximo 20 de agosto) y asumió la posibilidad de gobernar hasta terminar su periodo a través de decretos ejecutivos, que deben ser revisados por la Corte Constitucional.
Con la «muerte cruzada», Lasso eludió la posibilidad de que sea destituido en el Legislativo que se aprestaba a votar una moción de censura en su contra, acusado de malversación de fondos en una empresa del Estado.
