Este es el panorama en los afluentes y en el río Paute, en donde se encuentra el Complejo Hidroeléctrico más grande del país. Son cuatro centrales con capacidad de producir 2 000 megavatios. Dependen del agua que baja por el Paute, pero sus niveles son los más bajos que se han registrado desde que inició el estiaje en octubre pasado.
Una muestra es Mazar, el nivel de su embalse cayó a 2 108 metros. Por debajo del mínimo de operación segura fijado en 2 115 metros. Esa Central puede producir 170 megavatios, pero con un solo generador en operación aporta cerca de 55 megavatios. Lo mismo pasa en Amaluza, embalse de la Central Paute Molino. Su nivel del embalse es de 1 974 metros, uno por debajo de la cota de operación mínima. Tiene 10 turbinas generadoras con capacidad para 1 100 megavatios, pero este lunes solo llegó a 577 megavatios.
La caída de los niveles del agua se traduce en la reducción de la producción hidroeléctrica. En las cuatro centrales del Paute la caída fue el 30% en cuatro días. Pasó de 1439 megavatios por hora a 1014. Este 16 de abril, el presidente Daniel Noboa anunció que iniciaron una investigación por sabotaje al sistema eléctrico, y señaló que ha ocurrido un boicot en ciertas plantas eléctricas.
Acusó que esto ocurrió por motivos políticos, pues se produjo en la semana previa a la consulta popular. No obstante, Diana Atamaint, presidenta del Consejo Nacional Electoral, sostuvo que, en principio, el Gobierno garantizó que no habrá cortes de luz durante las votaciones para la consulta popular, el domingo 21 de abril. El Ministerio de Energía reafirmó que esta medida continúa al declararse el estado de emergencia energética, provocada por una crisis que tiene varios factores (climático, planificación, administrativa, corrupción histórica).
Los cortes de energía son de diferentes magnitudes en algunas ciudades los cortes serán de tres horas, mientras en otras ciudades, llegarán hasta siete horas sin energía eléctrica en diferentes franjas horarias.
